Andrés Fortuño
Julio es uno de esos meses donde ya sentimos el calor en todos lados. El sol se mantiene arriba por más tiempo y nuestros jardines comienzan a sentir los estragos del verano. Los días son más largos, las noches menos frescas y las plantas necesitan algunos cuidados especiales.
La buena noticia es que podemos hacer muchas cosas para contrarrestar cualquier daño que pueda ocasionarnos esta época. Todo es cuestión de usar un poco de sentido común y dejarle saber al jardín que no estará solo luchando contra los embistes y cambios del clima.
1) Riegos Constantes
La primera regla del verano son los riegos constantes y estratégicos. Esto lo que quiere decir es que en vez de regar a cualquier hora del día y esporádicamente, regaremos tempranito en la mañana o ya bien tarde cuando el sol haya bajado. También es importante regar de forma constante y profunda por lo menos una vez a la semana.
Cuando se riega en la mañana, las plantas tienen tiempo de absorber el agua antes de que el sol caliente y la evapore. Por otro lado, cuando se riega al final de la tarde el terreno tiene tiempo de llevar el agua a las capas más profundas durante la noche. Ambos tipos de riego son beneficiosos para las plantas.
2) Fertiliza Entre Riegos
Debido a la humedad y el sol que llegan con el verano, lo natural es que tus plantas también requieran de buenos fertilizantes. Aprovecha esta época en que tus plantas andan produciendo nuevos tejidos para proveerles los nutrientes que necesitan y crecer bien saludables.
Entre las mejores opciones se encuentran los fertilizantes solubles en agua. Estos son muy buenos ya que los puedes intercalar entre riegos, dejando que se diluyan con el agua a través del terreno. Recuerda que el exceso de fertilizantes puede quemar las plantas, así que sigue las instrucciones al pie de la letra.
3) Agrega Cuerpos de Agua
Si quieres mantener niveles de humedad más constantes en el jardín o la terraza, coloca fuentes de agua o un pequeño estanque. Esto no solo le dará al jardín una sensación de frescura, pero también servirá de bebedero para pájaros y otros animalillos beneficiosos para el jardín.
4) Propaga y Divide Tus Plantas
El verano es buena época para propagar plantas ya sea por gajo, acodo o esqueje. Cuando el sol está radiante nos proporciona la luz necesaria para que nuestras plantas se adapten y creen nuevos tejidos.
Aprovecha y divide tus plantas a través del método de propagación que mejor les convenga. Luego colócalas en un tiesto pero en algún lugar donde entre buena luz del sol. Una vez se estabilicen y se repongan del transplante, colócalas en el lugar de tu preferencia.
5) A Reponer el Pajote en el Jardín
Muchas veces con las lluvias a principios del verano, el “mulch” va menguando y hasta deshaciéndose. Échale otra capa de pajote o viruta de jardín “mulch” a las áreas que estén muy expuestas al sol. También alrededor de las plantas para que el terreno se mantenga húmedo por más tiempo.
6) Funguicidas Naturales
El verano puede traer muchísima humedad y con esta llegar algunos hongos y enfermedades que pueden afectar nuestras plantas. No esperes a que todas tus plantas se enfermen para entonces tratar de rescatarlas. Lo ideal es darles una ojeada de vez en cuando y atacar los primeros brotes de hongos con funguicidas naturales y orgánicos.
7) Elimina las Hierbas Malas
Igual de importante que tratar las enfermedades y plagas a tiempo, es eliminar las hierbas malas tan pronto comiencen a aparecer. Existen muchísimos métodos para atacarlas pero ninguno es tan eficiente como hacerlo manualmente.
El sistema de raíces de las hierbas malas puede ser muy agresivo, ya que se esparce por debajo de la tierra regándose de forma silenciosa por todo el jardín. Aprovecha los primero indicios y elimina de la tierra las hierbas malas sacando todas sus raíces. Puedes usar una palita de jardín para estos propósitos.
8) Elimina las Flores Muertas
Si quieres que tus plantas sigan floreciendo el resto del verano, comienza por eliminarle todas las flores según se vayan secando. Esto estimulará su crecimiento y la producción de flores nuevas. Puedes hacer lo mismo con las ramas y hojas secas que veas colgando en el resto de las plantas.
9) Airea la Composta
Si estás creando composta casera, los meses de calor son los mejores para airearla y humedecerla, de esta forma estarás promoviendo la fermentación del material orgánico de forma rápida y eficiente.
La composta orgánica casera es el mejor alimento que pueden recibir todas tus plantas y se puede utilizar todo el año. Así que si aún no has comenzado a prepararla, este es el momento perfecto.
10) Qué Plantar y Cultivar en Julio
Cuando el sol calienta, muchas plantas comienzan su producción de flores y frutos. Inclusive existen plantas que prosperan aún más cuando llega el crudo verano. Entonces, a la hora de plantar lo más importante es conocer el tipo de planta que vas a exponer al sol.
Si quieres plantas que te den flores y que sean buenas recibiendo el sol y el calor, planta Lantanas, Hostas, Crisantemos, Margaritas, Lirios de sol, Girasoles, Hibiscos, todo tipo de Palmeras, Bougainvilleas, Geranios, Rosas, Irises, Cactus, Suculentas, Petunias y Pensamientos.
También puedes crear un huerto casero o añadirle al que tienes plantas de Albahaca, Pimientos, Pepinos, Tomates, Salvia, Cilantro, Zanahoria, Berenjena, Calabazas y todo tipo de frijoles.
Julio es uno de esos meses donde ya sentimos el calor en todos lados. El sol se mantiene arriba por más tiempo y nuestros jardines comienzan a sentir los estragos del verano. Los días son más largos, las noches menos frescas y las plantas necesitan algunos cuidados especiales.
La buena noticia es que podemos hacer muchas cosas para contrarrestar cualquier daño que pueda ocasionarnos esta época. Todo es cuestión de usar un poco de sentido común y dejarle saber al jardín que no estará solo luchando contra los embistes y cambios del clima.
1) Riegos Constantes
La primera regla del verano son los riegos constantes y estratégicos. Esto lo que quiere decir es que en vez de regar a cualquier hora del día y esporádicamente, regaremos tempranito en la mañana o ya bien tarde cuando el sol haya bajado. También es importante regar de forma constante y profunda por lo menos una vez a la semana.
Cuando se riega en la mañana, las plantas tienen tiempo de absorber el agua antes de que el sol caliente y la evapore. Por otro lado, cuando se riega al final de la tarde el terreno tiene tiempo de llevar el agua a las capas más profundas durante la noche. Ambos tipos de riego son beneficiosos para las plantas.
2) Fertiliza Entre Riegos
Debido a la humedad y el sol que llegan con el verano, lo natural es que tus plantas también requieran de buenos fertilizantes. Aprovecha esta época en que tus plantas andan produciendo nuevos tejidos para proveerles los nutrientes que necesitan y crecer bien saludables.
Entre las mejores opciones se encuentran los fertilizantes solubles en agua. Estos son muy buenos ya que los puedes intercalar entre riegos, dejando que se diluyan con el agua a través del terreno. Recuerda que el exceso de fertilizantes puede quemar las plantas, así que sigue las instrucciones al pie de la letra.
3) Agrega Cuerpos de Agua
Si quieres mantener niveles de humedad más constantes en el jardín o la terraza, coloca fuentes de agua o un pequeño estanque. Esto no solo le dará al jardín una sensación de frescura, pero también servirá de bebedero para pájaros y otros animalillos beneficiosos para el jardín.

El verano es buena época para propagar plantas ya sea por gajo, acodo o esqueje. Cuando el sol está radiante nos proporciona la luz necesaria para que nuestras plantas se adapten y creen nuevos tejidos.
Aprovecha y divide tus plantas a través del método de propagación que mejor les convenga. Luego colócalas en un tiesto pero en algún lugar donde entre buena luz del sol. Una vez se estabilicen y se repongan del transplante, colócalas en el lugar de tu preferencia.
5) A Reponer el Pajote en el Jardín
Muchas veces con las lluvias a principios del verano, el “mulch” va menguando y hasta deshaciéndose. Échale otra capa de pajote o viruta de jardín “mulch” a las áreas que estén muy expuestas al sol. También alrededor de las plantas para que el terreno se mantenga húmedo por más tiempo.
6) Funguicidas Naturales
El verano puede traer muchísima humedad y con esta llegar algunos hongos y enfermedades que pueden afectar nuestras plantas. No esperes a que todas tus plantas se enfermen para entonces tratar de rescatarlas. Lo ideal es darles una ojeada de vez en cuando y atacar los primeros brotes de hongos con funguicidas naturales y orgánicos.
7) Elimina las Hierbas Malas
Igual de importante que tratar las enfermedades y plagas a tiempo, es eliminar las hierbas malas tan pronto comiencen a aparecer. Existen muchísimos métodos para atacarlas pero ninguno es tan eficiente como hacerlo manualmente.
El sistema de raíces de las hierbas malas puede ser muy agresivo, ya que se esparce por debajo de la tierra regándose de forma silenciosa por todo el jardín. Aprovecha los primero indicios y elimina de la tierra las hierbas malas sacando todas sus raíces. Puedes usar una palita de jardín para estos propósitos.
8) Elimina las Flores Muertas
Si quieres que tus plantas sigan floreciendo el resto del verano, comienza por eliminarle todas las flores según se vayan secando. Esto estimulará su crecimiento y la producción de flores nuevas. Puedes hacer lo mismo con las ramas y hojas secas que veas colgando en el resto de las plantas.
9) Airea la Composta
Si estás creando composta casera, los meses de calor son los mejores para airearla y humedecerla, de esta forma estarás promoviendo la fermentación del material orgánico de forma rápida y eficiente.
La composta orgánica casera es el mejor alimento que pueden recibir todas tus plantas y se puede utilizar todo el año. Así que si aún no has comenzado a prepararla, este es el momento perfecto.
10) Qué Plantar y Cultivar en Julio
Cuando el sol calienta, muchas plantas comienzan su producción de flores y frutos. Inclusive existen plantas que prosperan aún más cuando llega el crudo verano. Entonces, a la hora de plantar lo más importante es conocer el tipo de planta que vas a exponer al sol.
Si quieres plantas que te den flores y que sean buenas recibiendo el sol y el calor, planta Lantanas, Hostas, Crisantemos, Margaritas, Lirios de sol, Girasoles, Hibiscos, todo tipo de Palmeras, Bougainvilleas, Geranios, Rosas, Irises, Cactus, Suculentas, Petunias y Pensamientos.
También puedes crear un huerto casero o añadirle al que tienes plantas de Albahaca, Pimientos, Pepinos, Tomates, Salvia, Cilantro, Zanahoria, Berenjena, Calabazas y todo tipo de frijoles.