Qué Hacer en el Jardín en Septiembre

Qué Hacer en el Jardín en Septiembre


Consejos para fines del verano y comienzos del otoño.
Consejos para fines del verano y comienzos del otoño.
Andrés Fortuño

Septiembre es uno de esos meses donde lo mismo llueve que sale el sol. También dependiendo de la zona de clima en que vivas lo mismo llega algo de frío que igual se mantiene caliente. Entonces hay que estar muy pendientes de los pronósticos del tiempo para no trabajar de más o de menos en nuestros jardines.

Lo bueno que trae este mes es la promesa de que el clima irá refrescando, quizás una mejor noticia para las zonas calientes. Pero no importa el área en qué vivas siempre habrá muchísimas cosas que se pueden hacer en pro de un jardín saludable.

Planta Árboles y Arbustos

Ahora que el sol va cediendo y dándole menos tregua al terreno, es tiempo de plantar cosas más permanentes. Los árboles y los arbustos suelen establecerse mejor cuando se plantan a principios del otoño, ya que el terreno retiene mejor la humedad y está menos caliente.

Aprovecha este mes para plantar un árbol o establecer setos. Un árbol le puede agregar altura y sombra a cualquier área del jardín. Recuerda dejar suficiente espacio entre los arbustos para que corra el aire y regar bastante en lo que se establecen. Cuando plantes árboles, asegúrate de conocer la altura, el ancho y el tipo de raíz que tendrá una vez llegue a ser adulto.

Planta Rosales

Los rosales igual que los árboles se establecen más rápido en esta época. Una de las razones es que una vez termina el verano, estos pueden concentrarse en echar nuevas raíces en vez de invertir su energía creando hojas, ramas y flores.

Recuerda plantarlos en algún lugar donde reciban buen sol, sobre todo durante la primavera y verano. Deben recibir entre 6 a 8 horas diarias de pleno sol. Fertiliza de forma orgánica, ya sea con composta o con humus de lombriz. Los rosales tienen buen apetito para los nutrientes naturales.

Planta Bulbos de Primavera

Este mes es perfecto para comenzar a plantar los bulbos primaverales, como por ejemplo los tulipanes, los narcisos, los jacintos y los azafranes, . Dependiendo del tamaño y el tipo de bulbo estos necesitarán que los plantes más o menos profundos en el terreno. Los más grandes usualmente se plantan a una profundidad de 8 pulgadas y los más pequeños a 4.

Si vives en una zona muy caliente donde este tipo de bulbo primaveral no crece con facilidad, puedes aprovechar para sembrar plantas que normalmente no resistirían el fuerte sol del verano. Entre las plantas anuales florales que se más consiguen en esta época del año están los crisantemos y los pensamientos.

Deshierba

Bajo el fuerte sol, la humedad y en los espacios más resecos del terreno, quienes mejor sobreviven son las hierbas malas. Estas aprovechan los espacios vacíos que dejan algunas plantas que no pudieron sobrevivir el verano para establecerse, crecer y regar sus semillas.

Elimina cualquier crecimiento de plantas que tu no hayas plantado. Recuerda que con el viento y el paso de los pájaros que visitan tu jardín, llegan semillas que pueden terminar invadiendo el espacio. Aprovecha que el terreno está seco y elimina las malas hierbas antes de que comiencen a producir semillas.

Enmienda el Terreno con Composta

Justo antes de que comience el otoño, es el mejor tiempo para proveerle a nuestras plantas un puñado de nutrientes que las ayuden a ponerse fuertes y a prepararse para frío que está por venir. Para esto, los fertilizantes orgánicos como la composta madura o el humus de lombriz de tierra son fantásticos.

Puedes mezclar la composta con las primeras capas de tierra, así también estarás aireando el terreno.  O simplemente regar una capa de este material orgánico maduro y dejar que las lluvias y los riegos se encarguen de diluirlo a través del terreno.

Hidrata de Forma Profunda

Luego del verano los terrenos pueden estar secos, desnutridos y faltos de agua. Riega, pero es bien importante que cuando lo hagas, esperes a que la tierra se haya enfriado. O sea, no riegues al medio día ya que el agua se evaporará con mucha más facilidad.

Para riegos más efectivos, espera a que sea tarde en la tarde o hazlo bien temprano en la mañana. Riega de forma profunda para que el terreno pueda absorber y que el agua llegue a las capas más profundas del terreno.

Dale Color al Jardín

No todas las plantas florales disfrutan del crudo verano y del exceso de sol. Inclusive algunas quedan secas, maltrechas o ni siquiera sobreviven. Pero durante el mes de septiembre las puedes substituir con otras variedades de plantas de bellas flores y que prefieren los climas más frescos.

Entre las variedades preferidas para esta época se encuentran los crisantemos, los pensamientos, muchos tipos de rosales, la salvia y la caléndula. Antes de plantar, asegúrate de colocarlas en un lugar que les favorezca para que te duren más tiempo. Observa el sol y el viento que pega en el área.

Regresa las Plantas a Interiores

Si vives en una zona de clima cambiante, donde el otoño se puede volver algo frío, deberías ir entrando las plantas de interiores que sacaste durante el clima cálido del verano. Recuerda que los cambios bruscos no favorecen las plantas. Entonces cuando las regreses a interiores, colócalas cerca de una ventana donde les llegue buena luz del sol.

Si por el contrario vives en una zona de clima caliente, posiblemente es ahora cuando quieras sacar tus plantas a tomar el fresco en exteriores. Asegúrate de no colocarlas a pleno sol, ya que esto les puede quemar las hojas y aniquilarlas.

Hortalizas y Vegetales

Recoge las últimas cosechas y descarta los vegetales podridos que hayan caído al terreno. Estos pueden servirle de casa y alimentos a muchos tipos de plagas que anden buscando alojo antes de que llegue el frío invierno.

Esta es buena época para cultivar zanahorias, brécol, algunos tipos de lechuga y espinaca. Agrégale una buena capa de composta orgánica a tu huerto y elimina cualquier crecimiento de plantas que parezca querer invadirlo.